Kompong Phhluk y Khleang-11 de Mayo

Kompong Phluk y Kompong Khleang son definitivamente de esos lugares en los que sentis que la cabeza cambio de rumbo, donde el pasado se te hace presente y tus pensamientos pegan la curva. A pocos kilometros de Siem Reap pero no menos dificil de llegar se encuentran estos dos pueblos. A pesar de tener su calle principal bien definida, la tierra seca, roja y el sol colgando bien arriba del cielo, dandoles un aspecto mas parecido al lejano oeste norteamericano que una aldea camboyana, son pesqueros y granjeros por excelencia.Ambos dos sobre las orillas de rios afluentes al Tonle Sap, el lago mas importante de Camboya. En realidad, en este caso es dificil definir "orilla", creo que es mas correcto decir que se encuentran "sobre rios" afluentes al Tonle Sap.
Por suerte poco considerados, es mas, practicamente desconocidos por la gran masa viajera, se presentan autenticos, austeros y sensibles a nosotros, las visitas extranjeras.
Algunas imagenes de la ruta de llegada, la parte asfaltada, porque en la otra, la de barro, estaba agarrado al asiento de la moto que la montabamos de a tres y yo era el ultimo, mas preocupado por no estrellarme contra el piso que por sacar la camara.de lejos no entendia...
a medida que se acerco supuse la carga que llevaba.solo cuando nos paso logre saciar la intriga. viajaban muy prolijos y educados.

En esta epoca, final de la temporada seca, las casas muestran los pantalones bajos y sus piernas desnudas, que alcanzan en algunos casos, a los 8 metros de altura. Es lo que necesitan despegarse del suelo para mantenerse secos en la temporada de lluvias, entre junio y octubre, cuando el nivel de agua alcanza el punto mas alto.
Alejarse de la tierra representa un gran esfuerzo, no solo estructural sino tambien fisico, tener que subir y bajar escaleras empinadas durante varios meses para poder entrar a casa.Tarea que algunas veces obliga a hacer una escala intermedia para recuperar energias,Y en otras tomar la desicion de no bajar, al menos que sea realmente urgente.
Pero si hay algo mas impresionante que este paisaje son los paradores adonde las familias se pasan cuatro o cinco meses por anio. El horizonte desaparece y las tres dimensiones desvanecen, no existe la profundidad y todos los objetos, parecen flotar sobre un lienzo de un tono que va del azul grisaceo al terracota rosado sin interrupciones. Un desierto de agua.Durante los meses de sequia, el trabajo no cesa y gran parte de sus habitantes se trasladan como nomades, al centro del lago para montar sus viviendas provisorias y seguir pescando y criando peces. Algo particular, dado que la preocupacion en estas granjas pasa por mantenerlos vivos y en su habitat natural, engordarlos y venderlos en el momento oportuno.
Siguen con su vida normalmente. Dentro de su casa flotante...Secando la racion diaria de comida...cuidando su jardin...
criando sus lechones...
ofrendando a sus dioses...dando a luz y amamantando a sus hijos.La asistencia medica esta lejos y la medicina vernacular resuelve alguns problemas.Inclusive los chicos trabajan,
y hacerse un lugar no es nada facil.Las expresiones de sus caras dejan entender algunas tristezas y sus ojos, muchas veces, logran perforan el lente de mi camara y mi garganta anudada.Igualmente, logran disfrutan de lo simple, sin prejuicios, lo muestran sin pudor y te invade la sana sensacion de volver a darle el valor que se merecen las mas "minimas" cosas que nos rodean. El valor, que por el contacto diario con ellas, se nos va borroneando hasta desaparecer.

la excitacion y el placer de un chorro de agua refrescante,una mueca payasesca,volver a casa despues de un dia de laburo,la alegria de conseguir los cuadernos para la escuela,la sonrisa previa a saborear la manzana.o simplemente compartir un chaparron con tu mejor amigo...Y alli estan y estamos, disfrutando de estar hoy, juntos.